Con un bebé en casa, siempre hay que estar preparado antes cualquier situación, pero… ¿Sabes cómo reaccionar si tu bebé se cae?.

Cuando un bebé se cae, es conveniente visitar al pediatra, sobre todo en aquellos casos en los que se haya golpeado la cabeza, el abdomen o si ha perdido el conocimiento, aunque tan sólo sea unos pocos segundos.
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Pero vayamos por partes, ante un traumatismo, lo primero será coger al bebé y tratar de consolarlo, y aplicar lo antes posible hielo, sobre la zona afectada o chichones. Coloca el hielo en una bolsa o en un plástico, y colócalo en zona donde el bebé se haya dado el golpe en varias tandas, de unos diez minutos de duración cada uno. Con esto evitarás que le salga un chichón, y podrás reducir la hemorragia en caso de sangrado. En lugar del hielo, también puedes aplicar alguna locción de farmacia para golpes, como por ejemplo: Arnidol. Indicar que Arnidol es la mejor solución para los golpes, chichones, traumas puntuales o dolores de corta duración, dejando en la piel una sensación de efecto frío y evitando que salgan moratones o marcas en la piel.

Si tras la caída se observa que, ante determinados movimientos el niño llora o se visualiza una deformidad, es posible que se haya hecho una fractura. Ante esta situación, deberás inmovilizar la zona afectada, de la forma que resulte más cómoda para el bebé, y llevarlo de inmediato al hospital. Si tras el llanto el bebé vomita, no deja de llorar o se queda adormilado, entonces será momento de acudir inmediatamente a urgencias.

Recuerda que, cada situación o traumatismo tendrá un nivel de gravedad diferente, por lo que ante la duda, si no sabes cómo reaccionar, lo mejor será acudir a urgencias o pediatra.