La función del chupete es la de consolar al bebé y tranquilizarlo, de ahí que su nombre original viene a significar consolador o atontador, del inglés dummy. Pero, ¿es realmente necesario el uso del chupete?
Aunque el chupete parece ser un objeto indispensable en la canastilla del bebé, no es realmente necesario, en cierto modo, depende de cómo acostumbres a tu bebé. Algunos bebés necesitan estar chupeteando algo continuamente, o de lo contrario lloran. Otros bebés, utilizan otros recursos para consolarse, como puede ser chuparse el dedo. Pero hay un gran número de bebés que no necesitan nada.
Cuando el bebé es recién nacido, es frecuente, que alguien, de los que están a su alrededor, intente ponerle el chupete en la boca del bebé, aunque seguramente, lo que el pequeño busca es mamar. La mejor forma de tranquilizar al bebé no es ofreciendo el chupete, sino tomarlo en brazos.
En conclusión, podemos decir que el uso del chupete no es necesario, ya que no le ofrece al pequeño ninguna habilidad o capacidad nueva que le sea útil cuando crezca. El chupete solo sirve de consolador, pero existen otras formas de tranquilizar al bebé, como es hablarle, cantarle, tomarlo en brazos o prestarle atención cuando la demande.