Una de las mejores actividades que podemos realizar junto a los más pequeños de la casa es la de acudir al parque. Quizás, para algunos padres puede resultar una actividad un poco aburrida, pero han de entender que acudir al parque tiene grandes ventajas para nuestros hijos. Además, para ir al parque no necesitamos nada, en la mayoría de las localidades y barrios existe algún parque infantil, donde los pequeños pueden disfrutar en compañía de sus familiares y amigos.
El parque se puede considerar un sitio privilegiado, para aprovechar sobre todo en épocas en las que hace buen tiempo. Privilegiado porque ofrece al niño un lugar de estimulación, donde los niños se pueden relacionar con otros niños, hacer nuevas amistades, y por supuesto, donde pueden desarrollar y adquirir nuevas habilidades y destrezas físicas. La experiencia que aporta acudir al parque, de disfrutar y pasárselo bien, mejora la autoestima, la creatividad del niño y probablemente, todo su desarrollo.
Ventajas de acudir al parque:
Vamos a enumerar las ventajas que supone a los niños, el simple hecho de acudir al parque:
– El parque es un lugar para jugar y disfrutar: Ante todo, debemos entender que el parque es un lugar donde el niño va a ir a jugar y a disfrutar. El parque es un lugar destinado al juego, principalmente sin peligros, donde los niños pueden correr y saltar libremente. La visita al parque ayuda a desarrollarse emocionalmente al niño, además de ayudar a mejorar su autoestima.
– El parque es un lugar donde estimular la psicomotricidad: El parque es un espacio de estimulación de la psicomotricidad. En el parque, el niño corre, salta, sube y baja escaleras, intenta mantener el equilibrio, entre otras muchas opciones. El parque está especialmente indicado a aquellos niños que presentan dificultades o cierto atraso en este sentido. Hay que procurar dejar al niño libre, que sea el niño el que decida dónde quiere jugar. Además, siempre podemos animarlo o ayudarle a jugar con otros niños, o bien, si no se atreve a realizar ciertas acciones, podemos ayudarlo para que se le quite el miedo inicial. Como por ejemplo ayudarle a bajar por primera vez por un tobogán.
– El parque es un lugar para estimular el lenguaje: Aparte de ser un lugar de ocio y juegos, el parque también es un lugar excepcional donde los niños pueden estimular el lenguaje, ya que en el parque los niños se comunicarán con otros niños, intentarán hacerse entender, con lo que favorecerá su esfuerzo. La comunicación en el parque se basa en el juego, no está dirigida como en el colegio, por lo que serán los niños los que se tienen que esforzar, si quieren jugar con otros niños, conocidos o no.
– El parque es un lugar para mejorar las habilidades sociales: Entendiendo las habilidades sociales como las estrategias que los niños usan para relacionarse con los demás, el simple hecho de ir al parque, ya supone un beneficio para el niño, en cuanto utilizará y desarrollará esas habilidades sociales para pedir jugar con otros niños, resolver pequeños conflictos, proponer juegos, hacer nuevas amistades o hacer cumplidos. En este sentido, el papel de los padres se basará en explicar o enseñar al niño trucos para relacionarse con otros niños y cómo solucionar sus problemas ellos mismos.
– El parque es un lugar donde interiorizar las normas: Por último, podemos mencionar que el parque es un lugar lugar privilegiado para que los niños aprendan a respetar e interiorizar normas básicas de
relación social y comportamiento, como pueden ser por ejemplo: guardar los turnos, ponerse en fila, respetar los tiempos de uso y juego, etcétera.
Acudir al parque: Preguntas y respuestas.
– ¿A qué edad se puede ir al parque?
– Para acudir al parque no hay una edad determinada, depende de cada niño y también del tipo de parque. Normalmente
pueden acudir desde los dos hasta los siete años. Para los más mayores, es necesario proporcionarle un espacio
de juego al aire libre, siempre que sea posible, aunque en algunas ciudades existen parques también para niños hasta doce años de edad.
– ¿Debo acudir al parque todos los días?
– Si el tiempo lo permite, lo ideal sería acudir al parque todos los días, para que los pequeños puedan disfrutar de juego al aire libre. Para el niño, podemos comparar la necesidad de ir al parque, con la necesidad de ir al colegio, guardería, comer o dormir. Recuerda que acudir al parque, todo son ventajas.
– ¿Cuánto tiempo es recomendable estar en el parque?
– Tampoco existe una regla común, el tiempo de estancia en el parque dependerá de la disponibilidad horaria de la familia. Lo ideal entre una hora y hora y media.
– ¿Se puede castigar al niño sin ir al parque?
– Si entendemos acudir al parque como una necesidad, única y excepcionalmente podemos retirar este privilegio, por un día, pero de ordinario, no deberíamos utilizar esta medida de dejar al niño sin parque. En su caso, se puede castigar con otros privilegios menos necesarios, si lo que pretendemos es mejorar su comportamiento.
– ¿Y si el niño se porta mal?
– Si el niño tiene mal comportamiento, precisamente el parque es un buen lugar para manejar su conducta. Si se porta mal, hay que corregirlo, llamarle la atención, regañarle si fuera necesario. En el parque, podemos utilizar la técnica de «tiempo fuera» o la técnica de «la silla de pensar». Es un lugar muy eficaz para hacerlo. Si el niño muestra un mal comportamiento le podemos decir que se siente en el banco con nosotros tantos minutos como años tenga. Después se le manda a jugar de nuevo. El rato que esté en el banco comprenderá que está perdiendo tiempo de juego por no haber hecho lo correcto.
– ¿Y si en mi pueblo no hay parque?
– Puede darse la posibilidad de que en tu localidad o barrio no exista un parque con zona infantil habilitada. En ese caso, podemos llevarlos a otro espacio donde pueda jugar libremente, aunque haya que coger el coche e incluso transporte público. Comprobarás que merece la pena hacer ese esfuerzo.
Además, aparte de relacionarse con otros niños, conocidos o no, de poder disfrutar del aire libre, de correr y saltar a su antojo, en el parque el niño también puede montar en bicicleta, patinar, jugar con el balón, con raquetas y hacer otros ejercicios. ¿Nos vamos un rato al parque?
Fuente: Folletos de ayuda a padres y madres. Jesús Jarque García.
www.jesusjarque.com